Javier Ramírez: La UdeC es una expresión de su vinculación con la comunidad
13 de junio de 2012
Hoy el tema del patrimonio tiene que ver no sólo con aquello ligado al objeto artístico, cultural o histórico, sino que se involucra fuertemente, directa e indirectamente, con el desarrollo local y en la economía de una sociedad.
El director del magister en Arte y Patrimonio de la facultad de Humanidades y Arte, Javier Ramírez, recuerda que el concepto de bienes culturales surgió en Europa en los años 50. “Ello está vinculado a la idea -que incluso aparece en la política- de cómo conservar algo que es común, que pertenece a todos. Y recién en 1972 la Unesco realiza una convención de la que surge una declaratoria en la que se menciona qué se entiende por patrimonio, referido al patrimonio cultural y natural”, señala.
El año 2003, luego de una nueva convención de la Unesco, surge una declaratoria que fue recién ratificada en 2008 y que amplía el rango de patrimonio y profundiza en la salvaguarda del patrimonio cultural inmaterial. “Ese concepto, que puede ser muy técnico, señala que el hombre en sus prácticas desarrolla Patrimonio vinculado a la fiesta, a la música y a objetos. Es decir, a lo que el hombre produce. Esta tipificación de Patrimonio lo que busca es –técnicamente- organizar, definir, valorar lo que existe, y mencionar los campos disciplinarios que permiten su conservación, promoción y difusión…”, sostiene.
En ese sentido, el catedrático asegura que la UdeC resguarda un Patrimonio cultural que, según esta tipificación, va desde lo tangible hasta lo intangible. “Por ejemplo, tenemos el único monumento nacional en la Universidad: el mural Presencia de América Latina”.
En cuanto a términos surge aquí también un tema importante que la legislación chilena debe resolver: incorporar el concepto de Patrimonio cultural, porque sólo se maneja la noción de monumento en cuanto objetos, lo que no habla de esta manifestación más global. “Al nombrar, por ejemplo, al Mural de la Casa del Arte como monumento histórico, se está hablando de una condición de objeto artístico, pero no se refiere a la categorización en cuanto a la importancia patrimonial que tiene”, dice.
Ramírez señala que lo ocurrido con la plataforma de Facebook PatrimonioUdeC, donde se mostraron diversas manifestaciones y artículos sobre el acervo de la UdeC, demuestra que la Universidad cumple con las condiciones que la Unesco reconoce como importantes en el ámbito patrimonial, tanto en lo cultural, como en la ciencia y la educación.
“Todos estos bienes que posee la UdeC tienen una característica común, que tiene que ver con la excepcionalidad y los valores asociados a las prácticas culturales comunes, universalmente hablando. Cuando uno ve las colecciones, la Pinacoteca, la arquitectura, la literatura, todo eso es parte del patrimonio cultural. Ello es producto de una relación con la sociedad. La UdeC, más que depositaria de una colección, es expresión de algo, no sólo ligado a una ciudad, a una región, sino que al mundo. La (pre)ocupación por la conservación, la difusión de todas las áreas científicas y artísticas, tiene que ver con todo lo que promueve la Unesco”, señala.
En ese sentido Ramírez asegura que la UdeC no sólo ha construido un campus, sino que ha construido ciudad. “La Universidad tiene una vocación y un acervo cultural no por depositar cosas que son excepcionales, sino porque lo que tiene refleja la sociedad, lo que es y ha sido Concepción y Chile. La UdeC tiene una vocación en relación a lo local en el contexto mundial”, dice.
Hablar de artes y objetos culturales es sólo el resultante de una práctica, sostiene. “Si Tole Peralta promovió ante el rector David Stitchkin la adquisición de la colección de pintura chilena, lo hizo porque existía un contexto donde la Universidad consideraba necesario promover las artes plásticas chilenas, y en una condición cultural específica, ya que durante los años 50 y 60 hubo una efervescencia cultural en Chile y el mundo”, agrega el especialista.
La apertura de la Universidad hacia la sociedad, finaliza Ramírez, se refleja más allá de la falta de rejas en el Campus, sino que tiene que ver con una actitud y en cómo se promueve la relación con la comunidad.
Escrito por: Ximena Cortés /Revista Panorama UdeC